Chistes de pepito
La mamá llama a Pepito y le dice:
- Le dijiste a tu hermana que era fea, y esta llorando. Ve y dile que lo sientes.
Entonces, va Pepito y le dice a la hermana:
- Hermanita, siento que seas tan fea.
La profesora le dice a Pepito:
- A ver Pepito, si yo digo: "fui rica", es pasado, pero si yo digo: "soy hermosa", ¿qué es?.
- ¡Demasiada imaginación profesora!.
Pepito le pregunta a su maestra:
- Maestra, ¿me castigaría usted por algo que yo no hice?.
- No Pepito, ¡por supuesto que no!.
- Qué bueno, porque no hice la tarea de hoy.
Érase una vez Pepito que se puso a vender huevos dentro de una iglesia:
- ¡Huevos, huevos, a 10 pesos cada uno!.
Y el padre muy molesto grita:
- ¡Saquen a ese niño de los huevos!.
Y Pepito asustado le dice:
- ¡Padre, mejor de la orejita!.
En la escuela, la maestra dice:
- A ver Pepito, ¿cómo te imaginas la escuela ideal?.
- ¡Cerrada, maestra!.
Pepito está charlando con su maestra de cocina y labores:
- Pepito, tu mamá, ¿qué te pone en los huevos, sal o azúcar?.
- En los huevos me pone talco, señorita.
Llega Pepito con su Mamá y dice:
- Yo ya no quiero jugar con Juanito al rompecabezas.
- ¿Por qué?.
- Porque al primer martillazo ya está llorando.
Se levanta Pepito y le dice a su papá:
- Papá, papá, hoy me levanté con ganas de trabajar.
El papá le contesta:
- ¿Y qué vas a hacer?.
- Acostarme para que se me quiten las ganas.
El profesor repartiendo las notas:
- Luisito un diez.
- Pedrito un ocho.
- Juanito un seis.
- Pepito un cero.
- Oiga profesor, ¿y por qué a mí un cero?.
- Porque has copiado el examen de Pedrito.
- ¿Y usted cómo lo sabe?.
- Porque las cuatro primeras preguntas, están iguales, y en la última pregunta Pedrito respondió: "esa, no me la sé", y tú has puesto: "yo tampoco".
La madre le dice a Pepito:
- A ver si te portas bien, porque cada vez que haces algo malo me sale una cana.
- Ahhh, entonces tú debiste haber sido tremenda, porque fíjate cómo está la abuela.
Estaba Pepito en el patio y su madre le dice:
- Pepito, ve a la tienda y tráeme pegamento.
Y Pepito le contesta:
- ¡¡No!!.
Y la madre le dice:
- Entonces te pego.
Y Pepito contesta:
- ¿Y cómo me vas a pegar si no tienes pegamento?.
En esto que mandan a Pepito a comprar huevos y al llegar a la esquina ve un choque con muertos y heridos. Espantado, Pepito se regresa a casa y le cuenta a su mamá el choque: que un brazo por acá, que una pierna por acá, que la cabeza por allá, y la mamá le dice:
- ¿Y los huevos?
Y contesta Pepito:
- Esos no los vi, mamá.
Le dice la mamá a Pepito:
- Pepito, ¿por que le pegaste a tu hermana con la silla?.
¡Porque el sofá estaba muy pesado!.
Un día la maestra le dijo a Pepito:
- A tu edad yo me sabía todos los nombres de los países.
Y Pepito le contesta con una voz muy insultante:
- Porque en ese tiempo existían dos o tres solamente, maestra.
Pregunta la maestra:
- ¿Si yo tengo 1000 dólares y los pierdo, en otras palabras qué estoy diciendo?.
Se levanta Pepito y dice:
- Que es usted una tarada.
Le pregunta su madre a Pepito:
- ¿Pepito, sabes cuál es la diferencia entre la cortina del baño y el papel higiénico?.
Pepito contesta:
- No mami, ¿por qué?.
La madre furiosa dice:
- Entonces fuiste tú, cochinote.
Una vez Pepito llega a la escuela y el maestro le dice:
- Saca tu libro y tu cuaderno.
Pero Pepito le contesta:
- No tengo porque mi mamá es muy pobre y no puede comprar ni cuadernos ni libros para ninguna materia.
El profesor molesto le dice:
- ¿Qué pensarías tú de un soldado que va a la guerra y no lleva nada con que defenderse?.
Y Pepito contesta:
- ¡Que es hijo de mi mamá!.
La catequista le pregunta a Pepito durante el catecismo:
- A ver Pepito, ¿por qué los niños no deben de hacer ruido en la misa?.
Pepito contesta:
- ¡Pues porque hay gente dormida!.
- ¡Pepito! Estas notas merecen un escarmiento.
- ¿Verdad que sí mamá? Vamos, que yo sé donde vive la maestra.
Pepito en la escuela:
- Profesora, ¿qué significa "stronger"?
- Más fuerte.
- ¿QUÉ SIGNIFICA ""?
- ¡Te dije que más fuerte!
- Vieja sorda, ¡RRRRRRRRRRR!
Un dia Pepito le dice a su papá:
- Papá, dame un vaso de agua.
El papá se lo da, y al poco rato regresa y le pide otro y el padre contesta:
- ¡Pero si ya te he dado cinco!.
Y Pepito le contesta:
- ¡Es que se está quemando mi cuarto!.